El Real Decreto 900/2015 sobre autoconsumo que aprobó el Gobierno el pasado mes de octubre incluía una introducción que aseguraba que el objetivo era integrar la generación distribuida "de una manera eficaz en la red como un elemento de eficiencia, de producción y de gestión". La idea se suponía que era favorecer el autoconsumo con un marco regulatorio determinado y estable para que más gente se animase a generar y consumir su propia energía. Este jueves se cumplen cinco meses de esa aprobación, ¿ha llegado por fin esa esperada estabilidad y, por tanto, el momento de instalar placas solares?
Trámites que podrían no seguir siendo necesarios en unas cuantas semanas: todos los partídos políticos excepto el PP y UPN han pactado modificar sustancialmente el decreto en los cien días siguientes a la formación del próximo gobierno, algo que no parece que vaya a ocurrir de aquí a ese 10 de abril. También hay en marcha un proceso judicial: el Tribunal Supremo admitía este martes el recurso contra la norma interpuesto por varias asociaciones y grupos. Este podría tener como resultado la supresión del decreto, aunque es de esperar que pasen un par de años antes de que haya una sentencia.
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